El caucho también se conoce como un elastómero, que se produce como un producto natural de los árboles de caucho y también producido por procesos químicos. El primero se denomina caucho natural y el segundo caucho sintético.
El caucho también se produce como caucho reciclado al reciclarlo a partir de objetos usados y desgastados como los neumáticos de los automóviles, utilizados básicamente para fabricar mangueras y otros artículos sin importancia.
Caucho natural
El caucho natural se obtiene mediante la recogida de la leche de los árboles de caucho en las plantaciones de caucho, llamada látex. Se eliminan las impurezas presentes en él y se coagula con ácido acético débil. La materia sólida se hace pasar por rodillos para obtener caucho fluido y se procesa para obtener compuestos de caucho comerciales.
Recogida del látex del árbol del caucho
El látex también puede conservarse sin coagulación mediante aditivos que pueden utilizarse para diversos fines, como pinturas, guantes de goma, colchones de espuma de caucho, etc.
El caucho natural tiene una gran resistencia, una baja histéresis y una buena resistencia al desgarro y a la flexión. Sin embargo, se ve fácilmente afectado por los disolventes.
Caucho sintético
El caucho sintético se mezcla con el caucho natural para producir diferentes artículos de caucho. Se produce para servir a varios propósitos como la resistencia química y está disponible en dos tipos:
Caucho sintético de uso general: el caucho de estireno-butadieno es el preferido para fines generales.
Caucho sintético para fines especiales – El neopreno es un ejemplo de caucho sintético con cualidades específicas para adaptarse a diferentes fines.
Vulcanización del caucho
El caucho se vulcaniza para hacerlo estable a todas las temperaturas y para mejorar las cualidades de resistencia a la fricción, a los disolventes, a la durabilidad, etc. En el caso del caucho blando, se vulcaniza con la adición de entre un 1 y un 5% de azufre. En el caso del caucho muy duro, se vulcaniza con la adición de aproximadamente un 30% de azufre.
Vulcanización Juntas de caucho
Para fabricar neumáticos de caucho, se combinan cargas como el negro de humo para aumentar su rigidez. También se refuerzan con hilos de nailon o alambres de acero para que soporten fuertes cargas de impacto y golpes.
Usos del caucho
Los siguientes son los usos del caucho en la construcción:
- Se utiliza como mortero polimérico para mejorar sus cualidades de adherencia e impermeabilización.
- Se utiliza directamente en el hormigón para fabricar hormigón polimérico.
- Las baldosas de caucho se utilizan para los suelos elásticos que se fabrican con caucho natural y sintético como ingrediente básico.
- El hule negro para construcción se utiliza ampliamente para los cojinetes de los puentes.
- El caucho natural y sintético se utiliza para fabricar muchos productos utilizados en la industria de la construcción, como las tuberías de PVC plastificado, que se fabrican añadiendo caucho.
- Se utiliza en muchos tipos de pegamento, como el Fevicol, para añadir una mayor adherencia.
El caucho en el mortero de cemento y el hormigón
El látex o el látex polimérico añadido al mortero de cemento forma un sistema modificado con polímeros que presenta:
- una gran adherencia,
- una mayor resistencia a la tracción,
- resistencia a la compresión y a la flexión,
- una excelente resistencia a la penetración del agua y
- una mayor resistencia a los productos químicos
Canal de hormigón polimérico
El caucho natural puede utilizarse en la preparación de agentes aglutinantes, y estos agentes aglutinantes se añaden al cemento para reparar superficies de hormigón y enlucidas.
Las fórmulas de caucho sintético son costosas, y el mortero fabricado a partir de él se utiliza sólo para situaciones especiales. El caucho también puede utilizarse para fabricar hormigón polímero, especialmente para fines de impermeabilización. Para más información sobre el hormigón polímero, consulte el artículo: Tipos de hormigones de cemento utilizados en la construcción.
Suelos de caucho
Los suelos de caucho se utilizan mucho en situaciones como las salas de ordenadores o las bibliotecas, donde se necesita un suelo resistente. Estos suelos son resistentes al ruido y tienen la capacidad de comprimirse y volver a su forma original cuando se retira la carga.